
Cuando finalicé su lectura, me detuve en las fotografías centrales del libro, una y otra vez, tal y como cuenta que hacía el propio Jaume, cuando se revitalizaba mirando las imágenes de sus niños. Continuaba apegada al libro, que me mostraba una situación agridulce (dolor-amor), porque me resultaba reconfortante comprobar que hay personas íntegras y solidarias con el resto de la humanidad.
Ésta es su ONG, http://www.sonrisasdebombay.org/ y, a través de esta entrevista, se puede entender el alcance de su proyecto: