domingo, 29 de septiembre de 2013

Escribir, a solas



Una paradita en el camino de escritura en la red, para avanzar en un proyecto de escritura en solitario.

¡Nos vemos pronto!

jueves, 26 de septiembre de 2013

Olvidos y recuerdos

Reacciono mal cuando olvido que somos UNO. Lo olvido muchas veces, pero cada vez hay más distancia entre unas y otras, y ya... siempre soy consciente, casi al instante de haber reaccionado, de que lo había olvidado. Creo que es la mejor forma de seguir aumentando el trecho entre olvido y olvido y acortar el del recuerdo de lo que SOMOS.

domingo, 22 de septiembre de 2013

CALMA



La mente se alía al corazón,
y la razón, con la intuición, se sosiega.
Una paz inmensa inunda todo tu ser,
que nada pretende, que todo lo acepta.

miércoles, 18 de septiembre de 2013

“VIVIR EL PERDÓN ES RECORDAR CADA DÍA QUE MI FUNCIÓN ES REGRESAR A LA PAZ”


Adjunto algunos párrafos y frases de esta maravillosa conferencia de Jorge Lomar sobre el perdón (no serán totalmente textuales, pero respetan su mensaje). Me ha venido muy bien. Deseo que llegue también a vuestro corazón. Nos recuerda lo que tenemos que recordar J:

“Eres totalmente inocente. Siempre lo has sido. Todos somos totalmente inocentes”.
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El perdón es recordar que eres amor; es experimentar que el amor incondicional vive en ti, y lo vives cotidianamente, con las relaciones con otras personas, con la relación entre tu conciencia y tu personaje (la imagen de ti).

Has venido a perdonar a tu personaje; a mirar lo imperfecto desde lo perfecto. Desde tu corazón, vas a ver todo lo perfecto y no te puede hacer daño lo que ves.

Perdonar no es demostrar que soy mejor que tú y por eso te perdono, que no somos iguales: elitismo, arrogancia, ego…

Perdón es igualdad, unidad,  aceptación, inteligencia, espíritu, verdad.  Es deshacerte de la ilusión de que, porque vea un cuerpo distinto con mis sentidos, eres una mente distinta que yo.

¿Qué eliges? ¿La Unidad? ¿O sigues en la separación? Tienes todo el tiempo del mundo para decidir, pero lo que te hace sufrir es la separación; lo que te hace feliz es recordar la unidad.

Reconócete y no busques fuera, que lo de fuera es un escenario para que te recuerdes y, cuando te recuerdas, lo de fuera es maravilloso, tan maravilloso como lo que has recordado. Pero si te crees que eres incorrecto, vas a ver también un mundo terrorífico.

Lo que tu Ser quiere es que seas feliz. ¿Qué es lo mejor que puedo hacer por todo el mundo en este instante? Ser feliz.

Tu único objetivo es recordar el amor que eres, porque así pierdes los miedos al mundo y vives con gratitud y eso, una vez que lo sientes, es inevitable que lo compartas, porque no es tuyo, es de todos. Es natural; sencillo. Está en todos…




martes, 17 de septiembre de 2013

Tecnología con conciencia


La tecnología de hoy día tiene conciencia. No sé a vosotros, pero a mí me lanza avisos de lo que debo y no debo hacer:
¿Una llamada que no debo realizar?: teléfono fuera de servicio.
¿Un correo que no debo remitir?: se colapsa el sistema.
Las señales aparecen cuando menos lo esperas; sólo hay que estar atentos a ellas ;-)

domingo, 15 de septiembre de 2013

Al anochecer



Viivo con la firme convicción de que la responsabilidad nos hace buenos.
Creo que para querer de verdad primero hay que quererse a uno mismo.
Que hemos llegado a este mundo con la principal misión de aprender a amarnos y a amar.
Que querer saber quienes somos nos lleva a hacer lo que queremos.
Que la creatividad es la clara consecuencia de tratar de ofrecer lo mejor de uno mismo.
Cada noche repaso si, a lo largo del día, he vivido conforme a lo que creo.
Luego, me felicito por mis aciertos y me consuelo sin culpa por mis errores, porque me indican lo que aún debo aprender; porque me estimulan a continuar ahondando en mí hasta que, cuando me examine al anochecer, las felicitaciones superen con creces a los consuelos.

martes, 10 de septiembre de 2013

Un trabajo con sentido

  • Si has finalizado tus estudios y no sabes cómo abordar la búsqueda de empleo.
  • Si acabas de ingresar en el mundo laboral y sientes la incertidumbre propia de la falta de experiencia.
  • Si llevas años trabajando, pero vives el día a día en conflicto o con inseguridad.
  • Si quieres experimentar el trabajo como un camino de autorrealización y disfrute, y contribuir así al desarrollo eficiente de la empresa…… te aconsejo que leas mi libro La gestión de la vida en el trabajo, con el subtítulo Un proyecto laboral con sentido.

Para que tengas una idea más amplia de su contenido, aquí te ofrezco una entrevista que me hicieron con motivo de su publicación (abril de 2013) en la revista de tirada nacional Psicología Práctica.



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El trabajo debe servirnos para aprender, disfrutar y crecer”.

Concha Barbero

Revista Psicología Práctica, nº 51

 "Acéptate y acepta. Ésta es la consigna que la filóloga Concha Barbero te transmite si deseas no sólo hacer tu trabajo bien, sino también disfrutar con él y conseguir que te ayude a avanzar en el camino de realización personal.

¿Cómo vives el trabajo? ¿Como un medio para subsistir en la vida o como una vía autorrealización, aprendizaje y disfrute? Si te identificas con esta segunda opción, coincides con la visión de la filóloga Concha Barbero, que ha plasmado en su libro La gestión de la vida en el trabajo (Ediciones Obelisco). En él aborda con frescura diferentes aspectos del ámbito laboral, como la fase de búsqueda de empleo, los primeros días de trabajo, el asentamiento, los cambios que se producen con la consiguiente evolución o la tipología de relaciones en el entorno laboral. Asimismo, defiende la idea de que no sólo los éxitos nos hacen avanzar, sino también los fracasos y, sobre todo, la autoobservación, porque, como dice la propia Barbero, “cuando sólo miramos al exterior solemos equivocarnos”.

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¿Qué implica esa autoobservación de la que habla en su libro?

Concha Barbero: Que somos dueños de nuestra actitud en cualquier ámbito, y en el trabajo, ese “espacio” al que dedicamos tanto tiempo de nuestro corto paso por la vida, debemos tener muy presente esta capacidad para sobreponernos a cualquier circunstancia, desde dentro hacia afuera. En realidad, el trabajo debe servirnos para aprender, disfrutar y crecer. La mayoría de  nosotros iniciamos nuestro recorrido laboral con ilusión, pero la llama se va apagando poco a poco, en muchas ocasiones porque “entregamos” nuestro poder, nuestra facultad de ser felices, a las circunstancias y a otras personas.

Pero hay ocasiones en que las circunstancias nos vienen dadas… ¿Qué hacer si no nos satisfacen?

Captar el mensaje que nos traen. Nada es casual, sino “causal”, y determinados problemas que se nos presentan son los que “necesitamos” para asimilar aquello que precisamente nos impide ser felices en el trabajo. Nos despiertan, hacen que superemos retos hasta encontrarnos con quienes somos, y esa es la clave del bienestar en el trabajo y en la vida en general.

Usted escribe sobre las distintas relaciones que se establecen en el trabajo…

Así es. Un gran porcentaje de los trabajadores están conformes con la labor que desempeñan –les gusta su trabajo–, pero no lo están tanto con las relaciones que se establecen en él. Y dado que las relaciones que mantenemos con otras personas en realidad son un reflejo de la que tenemos con nosotros mismos, habrá que incidir en la gestión interna para poder mejorar la exterior. Ese será el modo más eficaz de relacionarnos con jefes, compañeros, clientes, proveedores y cualquier persona con la que establezcamos algún vínculo en este entorno.

Sin embargo, no todo el mundo tiene esa capacidad; muchas personas generan mal ambiente en el trabajo y lo contaminan.

Precisamente por eso es tan necesario el trabajo individual, el de aceptar nuestros miedos y transformarlos en amor. Un grupo de personas que han logrado conectar consigo mismas crean buen ambiente de una forma natural, y eso además propicia el mejor desarrollo de la empresa ¡y los buenos negocios! Hasta ese punto es esencial sentir quiénes somos en un terreno en el que afloran los egos con tanta frecuencia. En el libro desarrollo la tipología de personalidades que se dan en el trabajo, pero, analizándolas conscientemente, se concluye que son caras de una misma moneda, que muchas de las actitudes que deploramos están también en nosotros, que somos uno. Algunos han descubierto esto y otros no; y quienes no han llegado a esa conclusión sufren mucho, porque viven siempre en la separación, en la comparación y en la ambición.

 ¿Dónde está la clave para conseguir esa buena relación con uno mismo?

Debemos considerar nuestro potencial para reconciliarnos con quienes somos, para observarnos  sin culpa, para aprender de nosotros mismos, aceptarnos y amarnos. Cuando nos sentimos rechazados, la mayor parte de las veces se debe a que nos rechazamos nosotros mismos. Puede suceder que no te sientas bien en el trabajo y que, sin embargo, seas una persona muy noble, pero quizás no te valores lo suficiente y, como no te quieres, no te quieren… Obtenemos lo que proyectamos. Puede ser también que te sientas mal porque, sin que seas consciente de ello, actúes con egoísmo, cuya causa será igualmente la falta de amor por ti: reclamas a otros lo que no sabes encontrar en ti. Por tanto, experimentarás cada jornada de trabajo con frustración. En ambos casos, tendrás que lograr el equilibrio y la integridad personal para encontrarte en armonía contigo y para transmitir tu luz allá donde estés. En ti está el conflicto, pero en ti también está la solución. Cuando se toma conciencia de esto, todo comienza a cambiar a tu alrededor.

Le dedica una buena parte de su libro a los jóvenes y su acceso al mundo del trabajo…

Sí, los jóvenes precisan escuchar mensajes alentadores para abrirse camino profesional. Les ha tocado vivir una época complicada, pero muy potenciada en ese sentido por el bombardeo de negatividad en los medios de comunicación, en las casas, en la calle, en tantas conversaciones que solo emiten la idea de que no hay salida, de que no pueden hacer nada para avanzar. Y no es así, en cualquier circunstancia complicada unos avanzan y otros no debido, en gran parte, a la creencia en uno mismo, al encuentro con la fortaleza interior, a la confianza en la vida y a haberse forjado una mente próspera. Lo que crees o creas. Ellos, además, tienen menos prejuicios que nosotros, más capacidad para ilusionarse, y han venido al mundo con una gran sabiduría esencial. Hay que ayudarles y estimularles, y no preocuparles con nuestros miedos.

¿Por qué ha decidido escribir un libro sobre la realización personal en el trabajo?

Decidí reflexionar sobre la gestión de la vida en el trabajo cumplidas mis bodas de plata en la empresa. Desde mi experiencia, puedo afirmar que es de gran ayuda contar con la seguridad y las posibilidades que te ofrece estar sostenida por una organización estable, pero es esencial encontrar tu propia estabilidad, reconocerte y consolidarte internamente para, como expreso en el libro, “poder ir a favor de la corriente; para que las relaciones sean igualmente consistentes, para que tu vida laboral coincida con tus inquietudes, para que te sientas bien con lo que haces, que contribuya a tu realización y, por consiguiente, a favorecer el desarrollo eficiente de la empresa”. Parte de la narración es autobiográfica; otra, producto del análisis y de la reflexión, y determinadas circunstancias son figuradas, pero considero todas probables. De hecho, me he basado en el trabajo por cuenta ajena, y en el entorno de oficinas, que es el que más conozco, aunque su contenido, al estar centrado en la faceta personal, es aplicable a cualquier otro contexto y modalidad laboral.

Si tuviera que dar una clave principal para disfrutar en el trabajo ¿cuál sería?

Acéptate y acepta. Cuando te conoces y te aceptas, te reconoces en los otros y les aceptas como son; entonces, la comunicación y las relaciones mejoran indudablemente, porque se desarrollan en el ámbito de la humildad y la dignidad y, de ese modo, resulta muy gratificante afrontar el trabajo.

Pero uno no se acepta de la noche a la mañana…

¡Por supuesto que no! Para reencontrarte con quien eres, si te sientes perdido, has tenido valorarte, amarte, elevar tu autoestima, sentirte válido y necesario, que no imprescindible, para un proyecto común. Nadie puede dar lo que no tiene. Si no tienes amor por ti, no podrás trabajar con generosidad, porque, probablemente, sin que seas consciente de ello, tu labor tendrá la finalidad de mantener tu puesto, tu estatus, tu situación en la empresa, tu, tu, tu… Trabajarás compitiendo. Sin embargo, si te sientes bien contigo mismo, mantendrás una actitud de dar, de servicio y colaboración, un sentido superior del trabajo. Y en este caso, recibirás mucho más de lo que imaginas, no solo en el plano material, sino de afecto, de compañerismo, de alegría; en suma, en el día a día.

¿Se le puede poner humor al trabajo?

No concibo la vida sin sentido del humor. Y, en el trabajo, siendo responsables y aplicando el sentido común, puedes pasarlo muy bien y “echar unas risas” cuando venga al caso. A veces constituyen un impulso para la siguiente labor.

¿Quién dijo que el trabajo era para estar serio siempre?

¿Qué pensará de todo esto alguien que no encuentra trabajo o que está sufriendo dentro de él?

Me hago eco, por supuesto, de las personas que lo están pasando mal en este aspecto, pero para las que su mejor salida es, asimismo, encontrarse, ver su tesoro, reinventarse y avanzar con paso firme. Mantenerse en el lamento y en el temor no les va a ayudar; tratar de elevar su autoestima, por difícil que les parezca, les puede abrir la puerta hacia el desarrollo personal y profesional. Seguras de sí mismas, pueden ser fuente de prosperidad y, en lugar de buscar trabajo, incluso crearlo. Estamos viendo muchos ejemplos de ello: jóvenes emprendedores que, con una buena idea y la ayuda de las nuevas tecnologías y tantos canales disponibles hoy en día de promoción y comunicación, han logrado superarse a sí mismos y generar riqueza a su alrededor.


EL LIBRO


Concha Barbero.

Editorial: Ediciones Obelisco.

Páginas: 134.

Precio: 9,95 €

Puedes adquirirlo en cualquier librería o directamente en Ediciones Obelisco, El Jardín del Libro o Amazon.



jueves, 5 de septiembre de 2013

Pensarías y actuarías igual que él/ella

"Si su pasado fuera tu pasado, si su dolor fuera tu dolor, si su nivel de
conciencia fuera tu nivel de conciencia, pensarías y actuarías exactamente como 
él o ella. Esta compresión trae consigo perdón, compasión y paz. 
Al ego no le gusta oír esto, porque pierde fuerza cuando no puede mostrarse
reactivo y tener razón".

Eckhart Tolle, en El silencio habla.