“Vivimos en una sociedad basada en la exclusión, en
la que la idea básica es intentar apartar a la gente de nuestro camino. Yo creo
que cuando haces justo lo contrario, el mundo se abre ante ti”.
“Hemos
descubierto que actuar con humanidad tiene un efecto dominó. Incluso es posible
que no pueda seguir la pista de su buena suerte hasta que no se produzca un
encuentro específico, pero se trata de una certeza matemática que la fuerza de
la bondad asienta las bases para disponer de muchas oportunidades a lo largo
del camino. Las impresiones positivas son como semillas. Se planta y uno se
olvida de ellas, pero van creciendo y aumentando de tamaño bajo tierra, con
frecuencia de una manera excepcional”.
“Normalmente,
son los pequeños detalles –las sonrisas, los gestos, los cumplidos y los favores_
los que hacen que nuestra jornada sea mucho mejor, e incluso pueden cambiar
nuestra existencia”.