"Cuando tu hijo te cuente su sueño recuerda y recuérdale: nada es imposible.
Si tu hijo lo puede concebir, existe en él o ella.
Cualquier cosa pensada o soñada ya es parte de la Existencia.
Quizás su sueño habla de cuando sea adulto. Ten por seguro que sus pies ya están caminando hacia allí".
Cristina Romero en su libro Pintará los soles de su camino