lunes, 27 de septiembre de 2010

Las quejas y los juicios, a la papelera


En uno de esos días en los que te resulta difícil trascender, aunque tengas muy asimilado que es lo mejor, la escritura es muy terapéutica. No obstante, si estás leyendo esto, probablemente cada vez seas más consciente de esas "caídas", y las corrijas con facilidad.


Pero también puedes volcar sobre el papel o la pantalla del ordenador tus quejas, leerlas las veces que creas conveniente y seguro que, después, tienes la necesidad de romper el papel o de eliminar el archivo. 

Será un acto simbólico  para desechar de tu mente lo que la domina, lo que no sirve, pero se ha colado apenas sin darte cuenta, probablemente por alguna vieja convicción más presente de lo que crees.