Pero, al medio día, he recordado un texto de El poder del ahora, en el que Tolle nos aconseja que, en tales casos, nos concentremos en ciertos aspectos, así que me he retirado al campo y he seguido su consejo cuestionándome:
¿Qué estoy pensando?
¿Qué estoy sintiendo?
¿Cómo es mi respiración?
Después he realizado varias respiraciones, visualizando y sintiendo el aire que inhalaba y exhalaba y me ha faltado esto ( ) para quedarme dormida :-)De ese modo, mediante esa especie de meditación interrogante, y luego de otra práctica, he sido consciente de mí; he dejado de perderme en el exterior y he ido comprobando cómo se disolvía el estado incosnciente que me mantenía tensa sin motivo aparente.
Probadlo, porque funciona. Lo dejo a modo de ejemplo, por si os sirve de ayuda.