Porque...
Hemos asumido que no valemos, de la misma manera que pensamos que el mundo está lleno sólo de miseria.
La costumbre de mirar en gris ha cegado la belleza del mundo y nuestra luz individual.
Todo por evitar la exposición a lo que denominamos “riesgo”, pero que debiéramos llamar “vida”.
Mucho por complacer a otros y olvidarnos de nosotros.
Otro tanto por vivir distraídos de la vida y de sus posibilidades.
Hemos asumido que no valemos, de la misma manera que pensamos que el mundo está lleno sólo de miseria.
La costumbre de mirar en gris ha cegado la belleza del mundo y nuestra luz individual.
Todo por evitar la exposición a lo que denominamos “riesgo”, pero que debiéramos llamar “vida”.
Mucho por complacer a otros y olvidarnos de nosotros.
Otro tanto por vivir distraídos de la vida y de sus posibilidades.