La revista Redes para la Ciencia nº 18 publica una interesante entrevista a Isaac Mao, cofundador de CNBlog.org y director de la Social Brain Foundation, un organismo que promueve la libertad de expresión.
"Isaac Mao publicó la primera entrada en un blog chino en 2002 y, diez años más tarde, cuenta con una gran masa de seguidores por todo el mundo. Mao lleva años luchando contra la censura que su gobierno aplica a la red. Recientemente, ha desarrollado la teoría del “sharismo” –del verbo inglés to share, compartir- a través de la cual defiende un modelo social libre de las tradicionales reticencias a compartir información e ideas”.
El sharismo se basa en la idea de que una red neuronal existe para compartir actividad e información, y este modelo cerebral debería inspirarnos para las redes de colaboración humanas.
A continuación, reproduzco fragmentos de algunas de sus respuestas de una amplia entrevista que recomiendo leer completa:
“Creo que la especie humana ha sido capaz de desarrollar sociedades tan modernas y sofisticadas como las actuales gracias a su capacidad de compartir y conectarse; una tendencia que ha estado presente de forma instintiva desde las primeras comunidades de individuos. Sin embargo, desgraciadamente, en los últimos tiempos se ha perdido este instinto”.
“Después de la revolución industrial (…) la gente comenzó a focalizar sus energías en cómo conseguir beneficios. Y, a lo largo de este proceso, se instauraron muchísimas reglas con el objetivo de controlar la información, protegiendo así al sector industrial. Pero estas normas ya no tienen sentido. Y lo peor de todo ¡no son sostenibles!, especialmente en una sociedad cuyo status quo es Internet, una herramienta que justamente lo que hace es promover la colaboración y la conexión entre individuos”.
“A raíz de mi experiencia como empresario e internauta, hace años me di cuenta de que existían modelos de negocio alternativos y formas de relacionarse basadas en la voluntad de la gente por compartir y en el criterio personal a la hora de escoger información”.
“Ojalá la democracia pueda evolucionar hacia modelos cuyos mecanismos de participación vayan más allá del voto ocasional del ciudadano”.
“Ahora mismo hay miles de individuos conectados que, teóricamente, deberían estar enfrentados. Pero superan las diferencias de sus gobiernos o de sus familiares, y mantienen una relación porque les unen unas preferencias culturales e intelectuales”.
“El intercambio es el principal secreto de la inteligencia humana. Sin embargo, nuestra sociedad concibe este comportamiento –la secuencia de conectarse y compartir- como el equivalente a dar e, inevitablemente, también a perder. Pero no es así. (…) Compartir es poder. Estoy convencido de que la próxima superpotencia se regirá por el principio de compartir unos con otros”.
“Gracias a Internet, el ciudadano del mundo ha conseguido convertirse en el redactor de las noticias que protagoniza y, en consecuencia, ser más dueño de su propio destino”.
“Las empresas ahora comienzan a incorporar cierto grado de responsabilidad social, que las aleja de la tradicional visión marcada, únicamente, por el balance de resultados. Y, lo más importante, este cambio de paradigma se empieza a consolidar como una vía alternativa para obtener beneficios”.