jueves, 17 de marzo de 2016

Hacia ti


Cuando crees que alguien tiene la responsabilidad de un problema en tu vida necesitas hablarlo mucho para autoconvencerte de que la solución no está en ti.

Cuando descubres que la responsabilidad de lo que te sucede en la vida es únicamente tuya (por acción, omisión o consentimiento) comprendes que la solución está en el silencio, para poder recibir los mensajes de tu inconsciente.

En el primer supuesto vives de cara al exterior, pero encarcelado en ti; en el segundo experimentas la libertad aún sin salir de ti.